El alud que sepultó el poblado de El Cambray, en el sur del país, se ha saldado en el cuarto día de rescate con 131 fallecidos y más de 300 desaparecidos que no hay esperanza de encontrar con vida. 26 de los cuerpos recuperados son de menores.
El poblado era considerado de riesgo por las crecidas del río Pinula pero sus habitantes no tenían a donde ir.